Perdona, por favor, gracias

Vivimos en una sociedad de castigo.
Estamos acostumbrados a que, desde niños, nos digan lo que no debemos hacer, y sobre todo, lo que hacemos mal."Si no haces los deberes, no verás la tele". Incluso cuando crecemos, las reglas continúan funcionando del mismo modo. Aprendemos las reglas de circulación o cumplimos las leyes para evitar un castigo.
¿Cuántas veces al día se oyen en tu casa diálogos como este?
"PERDONA, ya que vas a la cocina, ¿podrías hacerme EL FAVOR de traerme agua?" "Claro CARIÑO (u otra palabra de afecto), no me cuesta nada." "Muchas GRACIAS"
Es más, ¿se producen estos diálogos cada día?
Porque yo te voy a recomendar que a tu perro, sí, a tu perro; puesto que hacia ellos es hacia quienes me enfoco, le pidas PERMISO, DISCULPAS, POR FAVOR y le des las GRACIAS. Pero acostumbrarte a ello en tu día a día mejorará tu bienestar, y también el de los que te rodean. Y cambiará las actitudes de los que están cerca de ti asiduamente.

Mi perra, cuando le digo "Cariño, me deixes puesto?" (Cariño, ¿me dejas sitio?) se levanta para dejarme pasar. Después, le doy las gracias.

Debido al tipo de educación que recibimos los seres humanos, inconscientemente educamos así a nuestros perros; a base de castigos. Pero por mucho que les gritemos y que les repitamos que lo están haciendo mal, ellos no hablan humano.
¿No preferiríais que cada vez que haces algo que se espera de tí se te felicitara? Como, "que casa tan limpia" o "qué comida tan buena", o incluso "gracias por los informes".
Pues si felicitas a tu perro cada vez que hace sus necesidades en la calle, aunque ya tenga 5 años; o si le felicitas cuando le das la orden de sube o de sienta (aleatoriamente, no hace falta que sea CADA vez); si le premias con comida o con juguetes (depende de lo que le guste más a tu perro) cuando hace algo que quieres que haga, algo que esperas que haga, refuerzas su autoestima como se reforzaría la tuya si te reconocieran el trabajo que haces cada día y que los demás dan por supuesto.

Tal vez puedas llevarlo a cabo también con la gente que te rodea, y no únicamente con tu mascota, y hacer más felices también a algunos seres humanos.